Este organismo pone de manifiesto, no obstante, que es posible que en los próxios meses se produzca un repunte de la inflación, provocado por el incremento de los productos energéticos y por el aumento de los salarios.

A pesar de estas tensiones, el informe concluye que "parece probable que la inflación no rebasará a finales de año el objetivo previsto del 2,2 por ciento". La CNMV, por tanto, no prevé problemas en el cumplimiento por parte de España del objetivo de precios marcado por el Tratado de Maastricht.

En relación con el déficit del Estado, constata que tras la publcación de los últimos datos de la Contabilidad Nacional la autoridad económica aventura que, incluso, este índice se podría situar por debajo del 2,5% al terminar el año.

Este buen resultado se debería a que el pago de intereses se ha concentrado en la primera mitad de este ejercicio y a que el aumento de los ingresos públicos está garantizado por la reactivación económica.

Además, la Comisión pone de manifiesto que el crecimiento de la actividad se debe especialmente a la recuperación del consum privado, puesto que se está moderando la aportación del sector exterior al crecimiento del PIB. También subraya que el empleo se está beneficiendo del mayor dinamismo empresarial.