"La CNE informa favorablemente la propuesta de Real Decreto, compartiendo el objetivo de establecer un sistema de tarifas que oriente la reducción de costes de la tecnología, para moderar su expansión y que las reducciones de costes se vayan transmitiendo al consumidor", afirma la CNE.

Además, considera "adecuado" el mecanismo de combinar el establecimiento de tarifas y cantidades objetivo que evolucionan en el tiempo de forma inversa ajustándose en función del comportamiento real del sector fotovoltaico.

No obstante, este organismo considera que resulta necesario concretar el régimen aplicable a las instalaciones que puedan ponerse en marcha durante el último trimestre de 2008 y durante el año 2009.

En este sentido, se propone que desde el 30 de septiembre de 2008 hasta el 31 de diciembre de 2008 no existan objetivos de cantidad y a todas las instalaciones que entren en el sistema en ese periodo se apliquen las nuevas tarifas contenidas en la propuesta de Real Decreto.

A partir del año 2009, la CNE propone que la convocatoria del primer trimestre para cubrir el cupo de 300 MW pueda ser atendida por instalaciones ya preparadas para funcionar comoproyectos.

Asimismo, para el año 2009 defienden la introducción de una mayor gradualidad, de forma que los objetivos para las instalaciones de suelo (tipo II) sea 250 MW y para las instalaciones de techo (tipo I) sea 50 MW.

Por otra parte, recomiendan introducir una disposición transitoria nueva para simplificar la gestión administrativa de los huertos solares.

"En la medida que aumente la potencia de la tecnología solar fotovoltaica, la CNE considera que se deben introducir mecanismos similares a los introducidos para la energía eólica para facilitar la operación del sistema", finaliza la organización.