Pérez, que ha sido duramente criticao por la Asociación Española Contra el Cáncer, declaró a Radio Nacional el pasado jueves que "investigaciones serias" han demostrado que fumar entre cinco y siete cigarrillos al día "no sólo no es perjudicial, sino que es beneficioso para el proceso respiratorio y pulmonar".

Reyes aseguró en declaraciones a Servimedia que la salud de cada persona condiciona el número de cigarrillos que deba o quiera fumar, porque "si a un asmático le das un cigarrillo, lo matas", pero a otras personas puede sentarles ien.

Argumentó que aunque su club no pretende defender que "meterse en los pulmones un cigarrillo es bueno, lo que sí dice es que es tan malo como meterse lo que sale por un tubo de escape y los vehículos no salen de las fábricas con un letrero que diga 'las autoridades sanitarias advierten que este vehículo mata'".

Recordó que Montserrat Caballé dijo que fumarse un par de cigarrillos mentolados es bueno para aclararse la voz, y que el doctor Grande Covián, un experto en nutrición, "se fuma su pa de pipas todos los días y le va tan ricamente, y ya tiene muchos años".

Recalcó que "un porcentaje altísimo de grandes genios de la historia", como Picasso y Albert Camus, "han sido fumadores", y se mostró convencido de que hay que desdramatizar los efectos del consumo de tabaco, porque "el año pasado nos fumamos 4.000 millones de paquetes".

Además, dijo que el peligro que supuestamente corre la salud de los llamadores "fumadores pasivos" es "una coña" en la que no puede creerse.

Sobre la pohibición de fumar en lugares públicos, se mostró convencido de que esas restricciones son innecesarias y que basta con un poco de "urbanidad y educación" para evitar las molestias mutuas.

Adujo que llevar estas prohibiciones al extremo al que se está llegando es un error, porque los fumadores podrían alegar que les molestan los olores, los gritos, los tacos u otros hábitos de las demás personas.

Finalmente, Reyes aseguró que en el hecho de fumar "hay que poner un poco de sentido común y de cordua", y agregó que "no hay que dramatizarlo ni criminizarlo, como nos quieren imponer algunos".