Esta formación política asegura que, en no pocas ocasiones, si el usuario introduce una moneda de cien pesetas -por no disponer de camio en ese momento- para realizar una llamada local de menos de un minuto, cuyo coste no es nunca superior a 25 pesetas, la cabina no devuelve el dinero restante, lo que genera la normal indignación del usuario.

En una pregunta formulada por el senador nacionalista catalán Salvador Capdevila y Bas, se piden explicaciones al Gobierno sobre la información de que dispone acerca de la práctica y programación de los aparatos de telefonía de las cabinas públicas para que no devuelvan moneda fraccionaria, conindicación de las medidas adoptadas o previstas en este sentido.