El Secretariado de Convergencia, reunido durante más de tres horas en el Palau de la Generalitat bajo la presidencia de Jordi Pujol, dio públicamente por cerrada la crisis con Unió, aunque valoró negativamente las consecuencias de la misma.

El secretario general de Convergencia, Pere Esteve, señaló tras la reunión que "uno de los elementos más negativos de esta pasada semana es que hemos hablado poco de los temas que son verdadramente importantes, y que son los que definen la lógica y el peso de la coalición", en referencia al Gobierno catalán y su relación con el central.

Esteve dijo que de momento no hay previsto ningún encuentro entre Pujol, el líder de Unió, Josep Antoni Duran i Lleida, y él mismo para tratar la reciente crisis de la coalición y se remitió al próximo comité de enlace de CIU, que tendrá lugar el próximo lunes.

Por otra parte, el secretario general de Convergencia negó que su partido haya encargado ecuestas sobre los resultados electorales que obtendría cada formación de CiU por separado, en respuesta a la información publicada hoy por 'El País', según la cual Convergencia obtendría 50 escaños y Unió 5.