CIS. EL 78,8% DE LOS ESPAÑOLES CREE QUE NO SE SALDRA DE LA CRISIS SIN UN ACUERDO ENTRE GOBIERNO, EMPRESARIOS Y SINDICATOS

- Más de la mitad cree que la reforma laboral supone un retroceso de las conquistas sociales de los trabajadores

- El 64 por ciento está a favor de los contratos de aprendizaje, aunque opina que los empresarios harán un "mal uso" de la reforma

MADRID
SERVIMEDIA

E 78,8 por ciento de los españoles creen que será "muy difícil" salir de la crisis económica sin un acuerdo entre Gobierno, empresarios y sindicatos, frente al 4,8 por ciento que no ven imprescindible este pacto para que se inicie la reactivación, según una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) a la que tuvo acceso Servimedia.

El mismo sondeo, realizado entre el 8 y el 13 de febrero en todo el territorio nacional a 2.501 entrevistados mayores de 18 años, señala que el 39,2, frente a 31,8 por ciento, creen que los sindicatos no están siendo realistas al oponerse a las medidas laborales del Gobierno, si bien, no dudan de que su intención de fondo es defender los interes de los trabajadores.

Sin embargo, las muchas huelgas laborales que hay en España, tienen para un 54,1 por ciento, carácter político, aunque un 65,1 precisa que cuando los trabajadores paralizan su actividad tienen razones fundadas para hacerlo.

LA REFORMA, CUESTIONADA

La crítica más significativa a la reform del mercado laboral es realizada por un 55 por ciento de los entrevistados, que creen que supone un retroceso en las conquistas sociales de los trabajadores.

Para un 39,1 por ciento el hecho de que el Parlamento haya dado el visto bueno a la reforma responde a que ésta es necesaria para salir de la crisis, mientras que un 34,1 por ciento está en contra de esta afirmación.

En este sentido, el 45,6 por ciento cree que la reforma laboral es necesaria para reducir el paro, frente al 25,7 que está encontra de esta medida.

Un 64,6 por ciento desconfía de los empresarios y creen que harán "mal uso" de la reforma en beneficio propio, y un 82,6 por ciento piensan que la crisis la terminarán pagando los trabajadores.

Sin embargo, un 67,9 por ciento opina que los empresarios son los que, en definitiva, crean empleo, y que, por lo tanto, se les debe dar facilidades para que inviertan.

DESPIDOS Y CONTRATOS

En la encuesta, a la que ha tenido acceso esta agencia, se desmenuzan las medidas más sgnificativas de la reforma aprobada por el Gobierno: Las modificaciones en cuanto a entradas y salidas del mercado de trabajo.

Un 64,9 por ciento está a favor de promover los contratos de aprendizaje para los jóvenes, frente a un 20,2 que está en contra, y el 62,3 cree que los denominados `contratos basura' pueden servir para que los jóvenes encuentren su primer empleo.

Asímismo un 45 por ciento se muestra partidario de favorecer la contratación temporal y a tiempo parcial, frente al 32-35 por cinto que está en contra. En el mismo sondeo queda reflejado que el 61 por ciento cree que estos contraros harán más fácil que los empresarios contraten trabajadores.

La flexibilidad del despido parece ser la cuestión sobre la que el ciudadano muestra una mayor susceptibilidad. Un 61,2 por ciento está en contra de reducir el coste de las salidas forzosas de las empresas y sólo un 21,2 está a favor. Facilitar el despido, según el 65,3 por ciento de los encuestados, haría aumentar el paro.

Sin embarg, un 30 por ciento, frente al 13 por ciento, cree que en España las indemnizaciones por despido son más altas que en el resto de los países europeos, si bien el 35 por ciento, frente al 18, está en desacuerdo con la aseveración de que en nuestro país es más difícil despedir a un trabajador que en los países comunitarios.

Por otro lado, el 47,3 es partidario de agilizar los trámites administrativos tanto de contratación como de despido, frente al 29,3 por ciento que está en contra.

MOVILIDAD

La ovilidad geográfica y funcional también es analizada en dicho sondeo. Un 54,8 piensa que se debe dar flexibilidad a la empresa para que pueda cambiar las funciones del empleado sin bajarle de categoría.

Sin embargo, los españoles todavía tenemos cierta reticencia a cambiar el lugar de residencia. Así, un 43,3 por ciento está en contra de facilitar a la empresa el que pueda cambiar el lugar de trabajo de sus empleados, mientras que un 36,1 por ciento está a favor.

La mayoría (un 64,9 por ciento) e partidario de pactar mediante convenio o acuerdos individuales las condiciones de trabajo, frente al 13,1 por ciento. El 50,2 está a favor de regular las agencias privadas de colocación, regulación recientemente aprobada por el Parlamento. Un 30,2 desconoce la existencia de estas empresas que facilitan la búsqueda de trabajo.

(SERVIMEDIA)
19 Jun 1994
J