En un comunicado conjunto, ambas asociaciones coinciden en que la pretensión de la UCI "deportivamente es un error", ya que, a su juicio, el cambio de fechas "convertirá a a Vuelta Ciclista a España en la tercera carrera en importancia del calendario internacional, contra la privilegiada posición que hasta ahora venía ocupando".

En opinión de los ciclistas y de los grupos deportivos españoles, estas circunstancias supondrían un importante menoscabo del prestigio de la Vuelta, "amén del cansancio físico y psicológico para los corredores profesionales españoles", y la ronda española quedaría como "refugio de fracasos del año en curso, con la consiguiente devaluación deporiva".

Además, agregan en el comunicado, "el interés publicitario de sponsors y patrocinadores, elemento primordial del ciclismo profesional, parece asegurado si la Vuelta Ciclista a España se disputa en sus fechas tradicionales, lo cual evidenciaría el tener una personalidad propia ajena a intereses extraños a la misma prueba".

Grupos y ciclistas exigen a la Federación Española de Ciclismo un posicionamiento "oficial y claro" y confían en que la sociedad Unipublic, la empresa organizadora de la pueba, "reflexione y haga ver a los impulsores de la idea la práctica unanimidad del ciclismo español en contra de la misma".

"La Vuelta Ciclista a España es y debe seguir siendo el buque insignia de un ciclismo que han hecho grande corredores, equipos, organizadores, medios de comunicación y aficionados y que no debe correr ningún riesgo sin causa grave y justificada", concluye el comunicado conjunto.

Hasta el momento, Unipublic no se ha pronunciado sobre el cambio de fechas, aunque el presidentede la Unión Ciclista Internacional, Hein Verbruggen, lo da por hecho. La Vuelta del año 1993 comenzará el 26 de abril en la Coruña y finalizará el 16 de mayo en Santiago de Compostela.