Fernando Checha consideró la convocatoria como "abierta y objetiva, producto de un acuerdo político y parlamentario", para rechazar las acusaciones de Foster sobre la escasa actuación sobre el entorno que permite esta remodelación.

Checa, que dió la razón al arquitecto inglés sobre el "feo" aparcamiento existente junto a la Puerta de Goya del Museo, señaló que las bases del concurso tenían necesariamente que respetar el entorno conolidado del edificio a petición del Ayuntamiento de Madrid.

Después de indicar que es voluntad del Gobierno y del Parlamento no librar "batallas partidistas" sobre el Prado, Fernando Checa reconoció haber hablado con Norman Foster de su proyecto alternativo, "producto de la libertad de cada uno", y su deseo por conocerlo, "para lo que hemos quedado para después de concluido el concurso".

El director del Museo del Prado anunció también en Santander que el presupuesto para el próximo año será muy smilar al de 1996, y aunque reconoció que pueden producirse recortes "están garantizadas las partidas para el aumento del personal".