En declaraciones a Servimedia, Escudero señaló que los dos grandes partidos nacionales "no desean que un musulmán que se siente totalmente español, cmo Mustafá Aberchán, sea presidente de Melilla".

A su juicio, el conflicto no proviene de la ascendencia marroquí de Aberchán, como cree el primer ministro del país vecino, Abderramán Yussufi, sino de que "quieren poner barreras a lo musulmán".

El dirigente islámico aseguró que no sintoniza con el ideario político del GIL, pero no entiende la actitud "muy farisaica y sospechosa del PP y el PSOE, que pelean en la arena política en el resto del país y en Ceuta y Melilla se unen contra un partido ta pequeño".

Escudero animó a socialistas y populares a que lleven a los tribunales a los dirigentes del GIL en las dos ciudades norteafricanas, si, como denuncian, los consideran unos "mafiosos".

La Federación de Entidades Religiosas Islámicas cree que desde que ha llegado el PP al Palacio de la Moncloa, se da "menos cancha que con el PSOE" a una comunidad importante como la musulmana, "que nos sentimos españoles, pero que parece que nos quieren confundir con lo árabe, lo promarroquí y lo integrisa".

"Están incumpliendo los convenios que firmamos, a los profesores del Islam no se les reconocen sus derechos y detrás de cada uno de ellos se ve la sombra de un integrista", explicó.