Cerdeira no puede asegurar, sin embargo, que Bermúdez haya sido comprada, aunque se muestra convencida de que "muy pronto se sabrá" lo que ha motivado el cambio de parecer de la tránsfuga socialista.

Susana Bermúdez denunció hace un mes que el grupo GIL había intentado comprarla y transmitió a algunos de sus compañeros de partidocual había sido la oferta que a través de un intermediario le habían hecho llegar.

La dirección socialista no ha podido ponerse todavía en contacto directo con la diputada tránsfuga que abandonó Melilla acompañada de sus dos hijas la misma noche en que firmó ante notario su adhesión a la presentación de la moción de censura que probablemente dará el poder al GIL.

El padre de la diputada y veterano militante socialista, Angel Bermúdez, está haciendo de intermediario y se ha comprometido a intentarreconducir la situación. Durante la tarde de ayer y la mañana de hoy ha mantenido conversaciones telefónicas con dirigentes del PP y del PSOE a los que ha garantizado que su hija no ha sido comprada.