El CES reconoce que la recuperación económica en 1994, "aunque moderada, está siendo más fuerte de lo esperado", y que la previsión de crecimiento del PIB del 1,3 por ciento puede ser rebasada finalmente en cerca de medio punto al finalizar el presente año.

Para este organismo, lo más importante es la tendencia al alza de la tasa de crecimiento económico en los tres primeros trimestres del año en comparación con 1993, que ha sido del 0,7 por ciento en el primero, 1,6 en el segundo y previsiblemnte del 2 por ciento en el tercero. El CES destaca que "la continuidad de esta tendencia es vital para la creación de empleo".

Sin embargo, el CES señala que, pese a esta recuperación, la economía española no consigue controlar el déficit público y la inflación. En su opinión, "a pesar de los objetivos moderados de reducción del déficit fijados para 1994 de no rebasar el 6,7 por ciento del PIB y el 5,9 por ciento para 1995, su logro en 1994 es cada vez más dudoso, arrastrando esta misma perspectiva tabién para 1995".

También considera que se sobrepasará en 1995 el objetivo de IPC del 3,5 por ciento del Gobierno, debido a que los trabajadores intentarán recuperar en un año de bonanza económica el poder adquisitivo que previsiblemente van a perder en su conjunto este año y a los efectos inflacionistas de la subida de un punto del IVA. Por ello, aconseja el replanteamiento de este objetivo.

Además, según el CES, sigue sin reducirse significativamente el diferencial de inflación con la media de ls tres países con menor subida de los precios de la Unión Europea, lo que, a su juicio, "pone de manifiesto la incapacidad de la economía española de avanzar en la reducción de la tasa de inflación al ritmo de los países con los que el comercio exterior es más importante"#.

EMPLEO FIJO

En cuanto al mercado de trabajo, el CES insiste en que lo importante es que el incremento del nivel de empleo basado en las nuevas modalidades de contratación se acabe traduciendo en empleo estable, circunstancia que onsidera fundamental para valorar los efectos de la reforma laboral.

Pero no todo es malo y el CES reconoce que muchos otros indicadores de la economía, como la actividad productiva, la producción industrial y las expectativas empresariales continúan mejorando. También destaca la favorable evolución de los resultados económicos de las empresas, motivados por el aumento de la productividad, el ajuste de las plantillas, la moderación salarial y la reducción de los tipos de interés.

El consumo, sin mbargo, señala el CES, sigue mostrando una "lenta" e "incierta" recuperación. Las ventas en grandes almacenes y el consumo de gasolina continúan descendiendo respecto al 93, mientras que el consumo de cemento y electricidad y las ventas de coches registran crecimientos importantes.