Así lo afirmó hoy en rueda de prensa Jesús Cruz, responsable de la preparación de la memoria del CES, tras la aprobación de este documento por el Pleno de este organismo.

El citado documento indica que las repercusiones sociales derivadas del fenómeno de la inmigración "obligan a buscar respuestas integrales al mismo, mas allá de su necesaria gestión desde la perspectiva del mercado de trabajo en la que ha estado centrada la atención en los últimos años".

En este sentido, Cruz destacó la necesidad de dotar de mayores servicios públicos a toda la población en España que, según la Memoria, ha registrado "un imprevisible, rápido e intenso crecimiento y está ya compuesta en un 10% por extranjeros".

Por su parte, el presidente del CES, Marcos Peña, afirmó que desde este organismo se aboga por la contratación en origen de los inmigrantes, por la contratación concertada y el cumplimiento riguroso de la ley.

Ante el incremento del paro entre la población extranjera, que ya constata la Memoria 2007, Peña aseguró que "el parado inmigrante no es una subespecie especial de parado, es un parado cuya característica es que no ha nacido aquí".