El economista Julián Pérez, que forma parte del equipo de Ceprede, explicó que hay varios factores que están influyendo en el rebrote de la inflación, como son la recuperación internacional de algunos precios (como el del petróleo) y la rebaja de los tipos de interés.

En cuanto al Producto Interior Bruto (PIB), se antendrá por encima del 3% este año y el próximo, lo que denota que nuestro país se encuentra en una fase de "sobreexpansión", en comparación con la media europea.

No obstante, según Pérez, España la economía nacional está en una fase de "suave desaceleración", que bien podría extenderse hasta la primera mitad del año 2000, como consecuencia de la caída de la demanda interna.

La reactivación de la economía internacional será el principal elemento que dinamice la actividad económica, según esta enidad, animada sobre todo por el mercado americano y por la recuperación del europeo.

Para Ceprede, que insistió en el buen momento que está atravesando la economía española, el principal problema es es la débil mejora de la productividad, que podría terminar conduciendo al incremento de la inflación diferencial y a la pérdida de competitividad.