Esta petición fue realizada precisamente por una mujer, la única vicepresidenta de CEOE y máxima responsable de la patronal de seguros (Unespa), Pilar González de Frutos.

Ante la Comisión Mixta Congreso-Senado de los Derechos de la Mujer y de Igualdad de Oportunidades, González de Frutos defendió que la presencia en los consejos de administración de mujeres se haga en función del mérito y de las decisiones de los accionistas, y no que, por una ley, tenga que haber entre un 40% y un 60% de féminas, como ha propuesto el Gobierno.

"No nos pidan a los accionistas que corrijamos una tendencia que no responde a criterios económicos y que es el único que gobierna a un accionista", sentenció la vicepresidenta de CEOE. "Trabajamos por la mayor rentabilidad de nuestra inversión. Por esos principios se rige (una empresa), no por cuestiones de género".

La vicepresidenta de CEOE opinó que, una vez que se noten los efectos de haber acabado con la discriminación a las mujeres en el ámbito educativo, su presencia en la dirección de las empresas llegará por si sola.

Recordó otros sucesos, como cuando el 2 de mayo de 1975 se permitió a las mujeres ser titulares de cuentas corrientes en un banco, pero no se obligó a ello, es decir, se dio un derecho, pero no se impuso una obligación.

El avance no se produce en función de imposiciones legales, sostuvo la responsable de Unespa. Además, "no basta con que nos permitan llegar, tenemos que consegeuir mantenernos, y eso no se hace con leyes".

El inversor sólo busca lo "razonable", que es "rentabilidad", y los "únicos parámetros" para conformar un órgano directivo "han de ser la capacidad, el talento y aportar valor". La CEOE apoya medidas de fomento y cualquier actuación contra discriminaciones, pero "rechaza la introducción forzada de cuotas".

González de Frutos recordó que la Ley de Sociedades Anónimas regula que la composición de los consejos de administración se haga en función del peso en el capital de las compañías, "y el capital no tiene género", y criticó que se prime en las adjudicaciones de contratos públicos a quienes tengan paridad en sus órganos de dirección, cuando "lo que debe primar es el interés general".

PLANES DE IGUALDAD

La vicepresidenta de CEOE también reclamó que se elimine la obligación de negociar planes de igualdad en las empresas de más de 250 trabajadores.

Recordó que el Estatuto de los Trabajadores ni siquiera impone la obligación de negociar ni el deber de acordar aspectos como el salario o la jornada, algo que sí se hace ahora con los planes de igualdad. Además, algunos de los que ya están en marcha "se pueden quedar en la nada" si se pone en marcha la ley en su actual redacción.

Esta obligación "distorsiona" la directiva comunitaria en la que se basa la Ley de Igualdad y el modelo de negociación colectiva que establece la Constitución, opinó González de Frutos.

Además, la obligación de negociar planes de igualdad "es un elemento de posible bloqueo de la negociación colectiva", con lo que esta medida "puede tener el efecto contrario" al que se persigue.

CRÍTICAS DE PSOE Y PNV

Los parlamentarios de PSOE y PNV criticaron algunos de los postulados defendidos por la vicepresidenta de la CEOE. Así, Carmen Hermosín (PSOE) defendió que las medidas incluidas en la ley "son positivas, constitucionales y no van contra ninguna directiva europea". Sin iniciativas como las incluidas en la norma, "difícilmente" se lograrán avances.

Por su parte, el senador del PNV José Ramón Urrutia reclamó a la vicepresidenta de CEOE información sobre el número de mujeres que hay en los órganos de dirección de la patronal y sobre su opinión acerca de lo que, según el peneuvista, es una discriminación a las féminas en determinados seguros.

González de Frutos defendió que la patronal no puede resolver la falta de mujeres en su seno, ya que se conforma en función de los representantes que proponen los sectores que la integran, y como cada sector propone una persona, en muchos casos, es "imposible" garantizar la paridad en ellos.

En todo caso, recordó que en dos años se ha duplicado la presencia de mujeres en la Junta Directiva, aunque sólo son seis de un total de 110 miembros, y que por vez primera hay una mujer ocupando una Vicepresidencia y dos féminas en el Comité Ejecutivo de CEOE.

Sobre su propia organización, Unespa, defendió que hay 21 mujeres y 20 hombres en su seno, y en la dirección, de cuatro personas, dos mujeres, la presidenta y la secretaria general, y dos hombres directores de área.

Para González de Frutos, lo conveniente sería que se tomasen medidas destinadas a orientar una mejor formación de las mujeres en los sectores de más demanda laboral.

Pero, en todo caso, sentenció que es "imposible" evitar una carrera profesional, y todo trabajador, hombre o mujer, requiere de 12 ó 15 años para ocupar un puesto de responsabilidad, al que "no todos llegan, y los que llegan, sería deseable que fuera por mérito".

En cuanto a las presuntas discriminaciones a la mujer en determinados seguros, como los de renta vitalicia, "hay una prestación superior, por tanto las primas deben ser más elevadas para las mujeres porque soportamos mayor riesgo de vivir". En otros, por el contrario, si es una prima para atender una coyuntura de muerte, "pagamos menos, porque tenemos menos riesgo que los hombres".