Jiménez Aguilar, que firmó hoy un convenio de colaboración con la Fundación ONCE para fometar el empleo de los discapacitados, afirmó: "Nosotros no notamos que haya una situación de tensión entre ambos sindicatos. Hay convenios que firma un sindicato y el otro no, pero eso ha pasado siempre, no ahora solamente".

Según Jiménez Aguilar, a la patronal no le han llegado informaciones de sus empresas sobre que haya problemas en la unidad de acción entre UGT y CCOO, "y, en cualquier caso, yo deseo que esas relaciones sean lo más fluidas y lo mejor que quepan, porque al final de cuentas redundan n beneficio de los intereses de las propias empresas".

"Nosotros no tenemos ningún interés en que se produzcan -los problemas entre UGT y CCOO- y, en cualquier caso, tampoco tenemos una información directa de que se esté produciendo ningún tipo de enfrentamiento", aseguró.

No obstante, el responsable de la CEOE cree que en ocasiones hay cosas que se sacan a la luz pública, y que, "a veces, son más objeto de los medios de comunicación que realidad en el fondo". Jiménez Aguilar destacó que la CEOE antiene unas relaciones "muy fluidas" con los dos sindicatos y "no hemos visto dificultades de entendimiento con ellos".

Jiménez Aguilar contestó también a la advertencia lanzada por el líder de UGT, Cándido Méndez, sobre una gran movilización, y dijo que los sindicatos tienen la libertad y el derecho a convocarla, pero que el mejor camino para solucionar los problemas es la negociación.

"Nosotros no vamos a criticar que los sindicatos tomen la decisión de hacer cualquier manifestación a favor decualquier tesis que ellos mantengan", apuntó, pero "para resolver los temas el camino es el diálogo social, y ese diálogo lo hemos ofrecido y lo seguimos ofreciendo".

El responsable de la CEOE recordó que los acuerdos sobre la reforma laboral tienen una vigencia de cuatro años, "y nosotros vamos a querer que se cumplan". Añadió que la patronal estará en todas las mesas de seguimiento de los acuerdos, "y los temas que haya que plantear en esas mesas, unas veces con acuerdo y otras sin él, serán objeto e debate entre los interlocutores sociales".

Según Jiménez Aguilar, "esa es nuestra forma de ver el problema, respetando que los sindicatos quieran convocar manifestaciones, porque ese es su legítimo derecho".