Un informe remitido por el Consejo de Seguridad Nuclear al Congreso de los Diputados, al que tuvo acceso Servimedia, señala que en estas instalaciones se ha reforzado la seguridad interior y la protección exterior, con la colaboración de las Fuerzas de Seguridad del Estado.

Asimismo, las entidades involucradas desarrollarán un plan e información para conocer los niveles de riesgo en cada momento, y se ha fijado un calendario de inspecciones, evaluaciones y auditorías en cada central nuclear, que se está llevando a cabo por unidades especializadas de la Guardia Civil y la Policía Nacional.

El CSN resalta que los sucesos del 11-S pusieron de manifiesto la existencia de nuevos tipos de amenaza para la seguridad ciudadana que aconsejan "revisar y potenciar" los sistemas de protección física de las instalaciones nucleares, así como aticular medidas adicionales a las establecidas por nuestra legislación.

Con este fin, el CSN ha colaborado con el Ministerio del Interior y representantes del sector eléctrico, y España ha participado en diversos foros internacionales que se han celebrado para analizar las nuevas necesidades de protección de las instalaciones nucleares.

De este modo, se ha desarrollado un modelo basado en los planes de protección física vigentes en las centrales nucleares, la Guía de Seguridad elaborada por el CS, los requisitos establecidos por las autoridades norteamericanas a sus propias centrales nucleares tras el 11-S, y las medidas acordadas con el sector eléctrico.

La mayoría de las medidas de seguridad física han sido implantadas ya, y las que requieren la instalación de nuevos sistemas de protección o están en proceso de selección y contratación terminarán de ponerse en práctica antes de que acabe este año.