Este plan de ahorro implica también más control de las inversiones y una mayor integración de todas las actividades, con la meta de reducir en 100 millones de euros los costes recurrentes de la sociedad, en tres años. Para 2009, el objetivo es conseguir un ahorro recurrente de 65 millones de euros.

El presidente y consejero delegado de la sociedad, Dieter Kiefer, mantuvo hoy el compromiso de cerrar este año con un margen operativo de alrededor del 28% sobre la cifra de negocio. También auguró que la generación de caja, descontadas las inversiones financieras y materiales, superará los 200 millones de euros.

Asimismo, la cementera sustituirá a medio plazo en sus fábricas más del 30% de combustible fósil por otros alternativos, para conseguir más eficiencia energética en los procesos de fabricación.

Con todo ello, Cementos Portland Valderrivas confía en "alcanzar los resultados esperados, una vez que la situación económica actual empiece a mejorar".