Según informaciones de prensa publicadas hoy, Sala reconoció el martes, durante un almuerzo con mujeres empresarias, que establecer la primera línea férrea del TAV entre Madrid y Sevilla fue un error de planifiación, porque Sevilla no es el lugar "donde más clientes va a tener ese ferrocarril".

En ese encuentro, la presidenta de Renfe se mostró partidaria de una visión "más global" de las infraestructuras, atendiendo al criterio de que no se pueden diseñar las líneas férreas sin tener en cuenta dónde hay aeropuertos y carreteras en condiciones.

Sala llegó a afirmar en el transcurso del almuerzo: "Nos hemos gastado un dinero allá, seguramente más de lo necesario, y hemos olvidado otros lugares que a la arga lo necesitaban más".

Ayer, durante la presentación de la primera unidad del TAV en Barcelona, ciudad a la que llegó procedente de Francia, Mercé Sala intentó restar importancia a sus afirmaciones ante el foro de mujeres empresarias. "Eso es una opinión sobre el pasado", respondió a los periodistas. "Yo siempre digo que la línea ya está hecha y mi obligación como presidenta de Renfe es que el tren funcione el 19 de abril".

En la petición de comparecencia presentada hoy en el registro del Congeso de los Diputados, el CDS solicita a Mercé Sala que exponga "su criterio respecto de la planificación y consecuente política inversora ferroviaria vigente y futura".