De los 156 miembros del Consejo Confederal, 80 votaron a favor del informe de Fidalgo, el 54,5% del total. Mientras, otros 37 (23,71%) se abstuvieron y los 34 restantes, el 21,79%, votaron en contra.

Fuentes de la dirección del sindicato dijern hoy a Servimedia que, tras el episodio del cese de Rodolfo Benito y la dimisión de otros tres miembros del Secretariado, el sindicato "debe seguir trabajando, ya que tenemos muchos retos por delante, como la manifestación de Barcelona, el aumento del paro o las elecciones sindicales".

Por el contrario, el ex secretario de Organización y Comunicación, Rodolfo Benito, anunció tras el Consejo Confederal que recurrirá la votación, ya que, según sus cálculos, el rechazo a la gestión de Fidalgo fue mayor ue el que arroja el resultado "oficial".

La reunión del Consejo Confederal se inició a las 10,30 horas de la mañana y, tras la lectura del informe por parte de Fidalgo, las más de 50 intervenciones por parte de los asistentes y el cierre de la reunión por parte nuevamente del secretario general, concluyó pasadas las 19,00 horas.

En su intervención inicial, y previamente a la lectura del informe de gestión, que es lo que votaron los asistentes, Fidalgo explicó la remodelación llevada a cabo en el ecretariado.

CRISIS CERRADA

Según explicó el nuevo responsable de Organización de CCOO, José Luis Sánchez, es "innegable" que en el sindicato "ha habido una crisis" de la que CCOO "debe salir reforzada", ya que se "ha resuelto democráticamente".

Sánchez aseveró que en el transcurso del Consejo se hicieron diversos llamamientos para que el sindicato se concentre en su actividad en defensa de los trabajadores, puesto que en los últimos tiempos las informaciones sobre CCOO se referían a asuntos "qe nos gustan poco", en referencia a la crisis vivida en el Secretariado, que acabó con el cese de Benito y la dimisión de otros tres dirigentes.

El secretario de Organización señaló que el número de miembros del Consejo que mostraron su desacuerdo por la decisión de Fidalgo fue "minoritario". Por el contrario, fuentes cercanas a Benito dijeron que el rechazo fue mayor y que la mayor parte de las 50 intervenciones que se produjeron rechazaban los cambios por no ser legítimos.

Sánchez dio por cerraa la crisis "que no debilita" al sindicato y confió en que todos los dirigentes sigan trabajando en defender a los trabajadores.