Las centrales manifestaron que para hacer "realmene eficaz" la regularización de inmigrantes y lograr que no vuelvan a caer en la ilegalidad, "es absolutamente prioritario mantener el operativo del proceso de regularización, así como la actitud flexible presente", hasta la renovación de los permisos.

Asimismo, UGT y CCOO piden, a través de un comunicado, que el plazo para la regularización de los familiares que viven con estos trabajadores en nuestro país, que finaliza hoy, sea prorrogado en 3 meses más a partir del final de la entrega de permisos deresidencia.

Aunque el último proceso de legalización de inmigrantes concluyó el pasado 10 de diciembre, la entrega de tarjetas acreditativas del permiso de trabajo y residencia ha sufrido un retraso de varios meses en muchos casos. Esto ha condicionado el reagrupamiento familiar, debido a la necesidad de que el trabajador extranjero tenga normalizada su situación para poder solicitar la legalización de sus parientes.

Aunque la Administración todavía no ha facilitado el número de familiares, residntes en España, regularizados desde el 10 de diciembre de 1991 hasta el día de hoy, el director general de Migraciones, Raimundo Aragón Bombín, cifró la pasada semana en unas 3.000 las personas legalizadas.

Además, las citadas organizaciones exigen un plan de medidas de inserción social, "que no sólo es de estricta justicia, pues se trata de trabajadores/as legales, sino que es la única fórmula que existe para evitar la xenofobia y erradicar el racismo y la violencia".

Dentro de este plan de inseción, las centrales consideran prioritario solucionar el problema de la regularización de familiares, ampliando el plazo "en tres meses a partir del final de entrega de permisos, flexibilizando los requisitos en cuanto a documentos exigidos y presencia".