Según los representantes de los sindicatos, mientras que en países como Suecia el proceso de liberalización duró 20 años, y en un momento en que la Unión Europea ha dado de plazo hasta el 2006 para acometer este proceso, en España el ministro se "ha empeñado" en que a ley sea efectiva el 18 de mayo, lo que impedirá al nuevo Gobierno que nazca del 14 de marzo imponer su propio ritmo al proceso.

Por ello, tanto Vázquez como Cáceres pidieron al Ejecutivo prudencia a la hora de desarrollar el plan, aunque matizaron que no están en contra de la liberalización del sector en España.

Ante la nueva situación, RENFE se dividirá en dos partes; una pública, que se denominará AIF (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), y que se encargará de la construcción y matenimiento de las infraestructuras; y otra denominada RENFE-Operadora, que será la que tenga que competir con las nuevas empresas por el transporte de pasajeros y mercancías.

Los sindicatos mostraron su preocupación ante la posibilidad de que los trabajadores "sólo sepan en qué empresa están por la nómina", y el peligro de que no se delimiten claramente las competencias y las responsabilidades de ambas partes.

El dirigente de UGT avisó también de las dificultades que puede tener RENFE-Operadora ala hora de competir con otras empresas por el déficit existente en la compañía, que asciende a 7.300 millones de euros, y pidió que el Gobierno "absorba o condone la deuda, como con la televisión, para que pueda empezar de cero".

Vázquez pidió un plan de viabilidad para hacer frente al déficit, otro de negocio para que la empresa pueda ser competitiva, y un convenio que sirva de "paraguas para evitar la competencia desleal con salarios muy bajos, jornadas muy largas y contratos en precario, como sucedó en las telecomunicaciones".

Por último, anunció que el próximo 13 de febrero tendrá lugar una concentración frente al Ministerio de Fomento por parte de los delegados, y una manifestación para el próximo día 21, que irá desde Chamartín hasta el ministerio y en la que participarán tanto delegados sindicales como trabajadores.