Fidalgo ha enviado una carta al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; al ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes; al de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, y al Consejo de Ministros, en la que exige que, como parte afectada por el decreto de devolución de este patrimonio, pueda participar e intervenir en los expedientes que se tramiten.

De esta forma, solicita que se tenga en cuenta al sindicato "en cuantos expedientes estén actualmente en tramitación", en los que se desarrollen en un futuro y en aquellos que ya se hayan resuelto, "para poder ejercer los mismos derechos que le corresponde como parte interesada".

Según el líder sindical, este "interés legítimo" deriva de que el decreto de devolución aprobado por el Congreso el pasado jueves, 24 de noviembre, afecta a "bienes y derechos que inicialmente estarían adscritos al Patrimonio Acumulado, con lo que se perjudica al resto de organizaciones sindicales que quedan privadas de su uso o disfrute".

Fuentes del sindicato aseguraron a Servimedia que el envío de esta carta es "un paso previo" a la tramitación judicial de la denuncia del decreto.

Fidalgo aseguró ayer que el Gobierno "actuó de mala fe" con la aprobación de la devolución del patrimonio histórico a UGT y denunció que "vulnera derechos constitucionales".

Con anterioridad, CCOO ya había defendido que esta medida era una "subvención encubierta" a UGT y que el sindicato que dirige Cándido Méndez no puede acreditar la titularidad de los inmuebles.