En declaraciones a Servimedia, el secretario de Información de CCOO, Javier Doz, manifestó que estas acusaciones carecen completamente de fundamento, y pidió al PCE que no se preocupe porque "cualquier tendencia burocrática que se instale en nuestra organización, intentaremos combatirla, cosa que deben hacer también todas las organizaciones".

Doz apuntó que entre las organizaciones políticas del ámbito de la izquierda "tiene que haber un respeto a la autonomía, que nosotros aplicamos rigurosamente a los demás y que pedimos que también se nos aplique a nosotros, y que dejen de hacer juicios de intenciones".

El portavoz de CCOO insistió en que el campo de actuación de los sindiatos es distinto al de los partidos políticos, "con independencia de que nuestro análisis de la sociedad o nuestro programa nos sitúe dentro del campo de la izquierda".

A su juicio, "hoy en día, la autonomía de los sindicatos es un elemento esencial que en absoluto significa para CCOO perder sus señas de identidad, su modelo de sociedad o su crítica a cómo está organizada la sociedad". Añadió que esto no significa indiferencia ante la política, porque que muchas decisiones sociolaborales tienen proyeción política.