El acto de protesta ha sido convocado por un grupo de organizaciones sociales, sindicatos, ecologistas y pacifistas, entre los que se encuentran CCOO, Aedeat, IU y la CODA. Estos colectivos solicitaron permiso para realizar la cadena humana desde la Embajada de Francia hasta el Ministerio de Asuntos Exteriores el sábado 16 por la mañana.

La Delegación del Gobierno negó la autorización porque la cadena humana iba a dificultar la movilidad de los mandatarios europeos. CCOO considera que se trata de una mera excusa, "porque los organizadores han propuesto a la Delegación del Gobierno no interrumpir el paso de las calzadas que nos indiquen, efectuando la caena humana por las aceras".

Los organizadores han decidido mantener la convocatoria, pese a la prohibición expresa, y han interpuesto un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid contra la resolución de la Delegación del Gobierno, "que fue realizada y notificada, además, fuera del plazo de 48 horas que este organismo tiene para contestar a los promotores", señala el sindicato en un comunicado.

Según CCOO, la no autorización de la convocatoria pacifista es n "acto antidemocrático que no tiene justificación alguna. Contrasta la actitud tan dura del Gobierno hacia las actividades pacifistas con su complacencia ante el Gobierno francés y su negativa a condenar las pruebas nucleares, absteniéndose recientemente en la ONU, despreciando así a la opinión pública española, que en un 90% está en contra de las pruebas".

CCOO exige al Gobierno que autorice la convocatoria pacifista y advierte que no respetará esta prohibición y llama a los trabajadores y al pueblode Madrid a realizar el 16 de diciembre la cadena humana contra las pruebas nucleares francesas.