Por ello, el sindicato liderado por Javier López pidió al Gobierno regional que constituya inmediatamente la Mesa de Suelo y Vivienda en el Consejo de Madrid, del que forman parte empresarios y sindicatos, para negociar un pacto social que la presidenta autonómica, Esperanza Aguirre, comprometió en la Asamblea de Madrid.

La secretaria de Política Social de CCOO-Madrid, Magdalena Macías, aseguró, a través de un comunicado, que "la situación de la vivienda en Madrid comienza a ser insostenible para muchas familias trabajadoras".

En este sentido, precisó que las mayoría de las hipotecas tienen un interés variable y las subidas de tipos de interés "pueden estrangular las economías" de las familias.

Para Macías, "el problema no es sólo de las familias. La especulación inmobiliaria amenaza también al sector de la construcción y de las entidades financieras".

Indicó que "un frenazo brusco" en la construcción "podría conducir a un aumento del desempleo y a un estancamiento de la actividad económica" porque este sector "está siendo el motor del crecimiento económico regional".

Y en cuanto a las entidades financieras, especialmente las cajas de ahorros, que acumulan el 53% de los créditos para vivienda, Macías subrayó que "las subidas de los tipos de interés y una mayor inestabilidad económica de las familias contribuirían al aumento de impagados".

Por su parte, el secretario general de CCOO-Madrid, Javier López, destacó que "la región debe apostar por un crecimiento más equilibrado, con mayor base industrial y con un mercado inmobiliario con mayor moderación de los precios y de los beneficios empresariales".

"Comprar una vivienda no puede hipotecar las economías familias durante toda la vida laboral de una persona y hasta sus futuras pensiones. Los madrileños tienen que decicar el sueldo de 15 años para pagar una vivienda con hipotecas que llegan ya a los 50 años. Cuanto antes afrontemos el problema de los altos precios especulativos de la vivienda, antes podremos abordar un modelo de desarrollo sostenible, justo y equilibrado", explicó.

Por último, López señaló que "aprobar una Ley del Suelo sin negociar antes un plan regional de estrategia territorial que defina desarrollos urbanísticos, espacios protegidos, áreas empresariales e industriales e infraestructuras de transportes, es tanto como alentar el urbanismo depredador poniendo el carro delante de los bueyes".