En un comunicado hecho público hoy, los responsables del sindicato consideran que "los calificativos de 'negro' o 'polaco', que a menudo salen por la boca de Gil, han de merecer algo más que una dura desclificación, para transformarse en una sanción ejemplar por parte del organismo federativo correspondiente".

CCOO advierte que son ya muchas las ocasiones en que el presidente del Atlético de Madrid realiza declaraciones "de marcado signo racista y xenófobo, incompatibles con los valores democráticos e incitadoras de actos violentos y fascistas protagonizados por los seguidores ultras del club".

Este tipo de consecuencias quedó plasmada, según el comunicado, el pasado domingo, cuando un grupo de etos hinchas profirieron insultos y amenazas a los jugadores en el momento de dirigirse al autocar que les trasladaría a Madrid.

El sindicato llama la atención sobre el papel que ante hechos como éste cumplen los medios de comunicación, "sirviendo no sólo de altavoz al racismo verbal de Jesús Gil, sino juzgando con insólita frivolidad y hasta con gracia sus alegatos xenófobos".

Si bien reconocen que no todos los medios ofrecen el mismo tratamiento informativo y de opinión, consideran necesario quese alcance un acuerdo profesional en defensa de la tolerancia y la diversidad, como valores consustanciales a una sociedad democrática y avanzada.

Por último, CCOO se dirige a los jugadores del Atlético de Madrid "para que más allá de su relación contractual con el club, sepan reaccionar contra los exabruptos racistas de su presidente de forma pública, para que su silencio no sea malentendido".