Por ello, el sindicato, en un comunicado de prensa, exigió que las retribuciones anuales y las condiciones pactadas de jubilación de los directivos y consejeros figuren de forma individualizada en las memorias de las entidades financieras.

Para Comfia, "estas decisiones (el pago de indemnizaciones tan abultadas) son incompatibles con los principios obligacionales recientemente adquiridos por el Consejo de Administración del SCH en materia de Resonsabilidad Social Corporativa".

Además, consideraron que las retribuciones a Amusátegui y Corcóstegui se hayan conocido por la prensa demuestra "las carencias de la legislación societaria española, la consiguiente indefensión del accionista y las limitaciones de la autoregulación que los gestores permanentemente invocan".

"El silencio del legislador, del Banco de España y de la CNMV proporciona el margen suficiente para la comisión de estas prácticas", asegura CCOO.

Así, creen que, tras obsrvar las consecuencias jurídicas en este tipo de actuaciones, "los auditores no deberían arriesgar su informe favorable a las cuentas anuales sin que en éstas se especifique de la manera más clara e individualizada, los compromisos presentes y futuros adquiridos por las entidades con sus consejeros y directivos".