Nadal, que recibió el apoyo de unas 300 mujeres del PSC reunidas en un hotel de Barcelona, así como de la ministra de Asuntos Sociales, Cristina Alberdi, dijo que, si hubiera una situación de igualdad, no harían falta cuotas femeninas, como tampoco sería necesario, en otro terreno, una ley para normalizar el uso del catalán.

El candidato a la Generalitat se comprometió, ante la insistencia de varias mujeres asisentes al acto, a incluir mujeres en su gobierno si gana las elecciones autonómicas. Nadal añadió que "no sabría hacer un gobierno sin mujeres y sin muchas mujeres".

El cabeza de lista del PSC, que presentó el programa de los socialistas catalanes para la igualdad de oportunidades entre ambos sexos, pidió a las asistentes que el próximo día 19 sean "activas agitadoras a favor de la propuesta socialista", tras criticar la política realizada por la Generalitat en materia de bienestar social.

Para Naal, hay que comprometerse con una radicalidad absoluta en los temas que afectan a la mujer respecto al hombre, "porque la situación es aún de clara discriminación".

MIEDO "FUNDADO" AL PP

Por su parte, Cristina Alberdi, indicó, durante el debate en apoyo a Joaquim Nadal, que en su departamento existe miedo "fundado" a que la política social de la mujer sufra un retroceso por parte de los gobiernos autónomos del Partido Popular.

Alberdi recordó que en algunas comunidades gobernadas por los populaes, como Murcia y La Rioja, "han comenzado por cambiar el nombre al Instituto de la Mujer y lo han convertido en Instituto de la Familia", hecho que hace suponer, dijo, que primará el papel de la mujer en relación con la familia.

La ministra señaló que "ese miedo lo tenemos todos porque la derecha ha tenido siempre en este país a la mujer con la pata quebrada y en casa".

Alberdi insistió en la política llevada a cabo por su ministerio para la igualdad de oportunidades y defendió la discriminaciónpositiva de la mujer porque, agregó, "el cambio no se va a producir por generación espontánea. Hay una presión social, una cultura que todavía no hemos podido cambiar".