A su juicio, "el propio presidente Pujol, jugando en casa, ha sido derrotado por los que él creía los suyos, es decir, el pueblo de Cataluña". Para López Bulla, los resultados de CiU no deben medirse sólo por el éxito electoral objetivo que ha tenido, sino por las expectativas que había generado.

Según López Bulla, el aumento de la participación se ha registrado sobre todo en tradicionales zonas absentistas, como algunos barrios de Barcelona y "determinadas capas mesocráticas de una u ora forma espiritualmente adictas a Pujol que en esta ocasión no le han dado su apoyo".

Otros aspectos destacables de estos comicios son, en opinión de López Bulla, que "el PP sale de la madriguera y toma una inquietante carga de naturaleza en Cataluña" y que Iniciativa per Catalunya-Los Verdes (IC-LV) ha obtenido un resultado "más que digno".

El responsable de CCOO se preguntó qué va a pasar a partir de ahora, y dijo que "sólamente lo sabe la cabeza de Pujol, pero sí que preveo que si Pujol se emeña en mantener las mismas formas de Gobierno, el mismo talante y las mismas prácticas, tendrá muchísimas dificultades, porque el cuadro general que se instala en el Parlamento ha cambiado".

"Estos políticos que durante tanto tiempo tienen estas mayorías tan holgadas y confortables, antropológicamente y políticamente no están preparados para esa nueva situación", explicó López Bulla, quien apuntó que "es posible que puedan tener a partir de ahora una especie de cuarto de kilo de sentido común que ante no tenían".

A la pregunta de si cree que CiU pactará con los socialistas para gobernar, a pesar de que el el pacto a nivel nacional no parece haberle favorecido en las urnas, López Bulla contestó que "Pujol es una persona imprevisible y hará lo que le interese a él".

"No sabemos si variará su política económica y social en Cataluña, pero ahora no está en la misma situación que antes. El plano maestro de la política social posiblemente no cambie, pero sí que se le pueden arrancar cachos de polítia social", concluyó.