Peñalosa y García Carnero eran objeto de investigación por parte del Tribunal Supremo en relación al supuesto cobro de comisiones ilegalespor la adjudicación de obras por parte de la Diputación de Zamora.

Además, el Tribunal Supremo estaba a la espera de que el Congreso y el Senado concediese el suplicatorio que había solicitado con el fin de que ambos parlamentarios del PP prestasen declaración en relación al "caso Zamora".

Ahora, tras la decisión de Peñalosa y García Carnero, falta que los presidentes del Congreso y del Senado acepten ambas renuncias y las comuniquen formalmente al presidente del Tribunal Supremo, Javier Delgado. Entonces, el caso pasaría a un juzgado ordinario de Zamora, y no al Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, al haberse disuelto las Cortes de esta comunidad autónoma y no figurar en las listas electorales ninguna persona aforada, ya que no está en las canidaturas el diputado provincial Luis Cid Fontán, imputado en esta causa, según fuentes jurídicas.

Sin embargo, según las mismas fuentes, el instructor del "caso Zamora", José Antonio Martín Pallín, podría decidir la imputación del diputdo del PP Luis Ortiz, también implicado en esta causa, con lo que las investigaciones continuarían realizándose en el Alto Tribunal.

MANIOBRA POLITICA

El abogado del PSOE en el "caso Zamora", Jacobo Echeverría, manifestó a los periodistas que la renuncia de Peñalosa y de García Carnero es una "maniobra política con la que el PP pretende desconectar la bomba del 'caso Zamora" y llevarlo a otro sitio, con el fin de que su resonancia sea mucho menor".

Para Echeverría, que lleva la acción popular dl "caso Zamora", el Tribunal Supremo "no debería permitir que esta maniobra triunfase, por razones políticas y jurídicas".

Por su parte, el abogado de Dionisio García Carnero, Juan Ramón Montero, señaló que la renuncia de su cliente es una "decisión particular y personal", e insistió en que, a lo largo de la investigación, aún no se han podido probar las supuestas irregularidades en las adjudicaciones de obras de la Diputación de Zamora.

TRAYECTO DEL "CASO ZAMORA"

El "caso Zamora" surgió en 199, tras la denuncia del presidente de la Diputación de Zamora y ex miembro del PP Antolín Martín sobre el pago de comisiones ilegales por adjudicación de obras desde la Diputación, a la que se añadió otra denuncia psterior del constructor Eduardo Corrales. Más tarde, la cuestión derivó hacia una supuesta financiación ilegal del PP.

El Grupo Socialista en la Diputación de Zamora presentó una querella contra ocho altos y ex altos cargos de la corporación provincial, entre los que se encontraban dos aforaos, Peñalosa y García Carnero, que habían ocupado en su día la vicepresidencia de la diputación.

La querella del Grupo Socialista se presentó en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, porque entre los querellados se encontraba Luis Cid Fontán, ex presidente de la Diputación de Zamora y diputado provincial.

Sin embargo, la condición de aforados de Peñalosa y de García Carnero obligó al Tribunal Superior de Castilla y León a remitir el caso al Tribunal Supremo.