Añadió que el presidente nacional del PP "carece de crédito con este informe, además de que ampara a los corruptos de Baleares y a los corruptos donde gobierna".

Triay reclamó la dimisión urgente de Cañellas como presidente del Gobierno autónomo y señaló que "el informe de la comisión es consecuencia de la falta de autoridad y de la falta de capacidad para resolver esta situación" porque "admie como inexistentes todo un cúmulo de evidencias".

Por su parte, el coordinador general de Izquierda Unida de Baleares, Eberhard Grosske, calificó el resultado del informe de "falta de vergüenza de marca mayor".

Apeló a la "coherencia, el sentido común y la vergüenza torera" de los dirigentes nacionales del PP e insistió en que, si en verdad Cañellas no cobró comisiones ilegales, el PP debería haberse querellado ya contra IU.

IU interpuso una querella contra el PP balear en el Tribunal Superor de Justicia de Baleares por un presunto delito de prevaricación continuada, por el supuesto cobro de comisiones a cambio de la adjudicación de obras públicas.

Sobre el futuro político de la región, Grosske dijo que "todo esto puede pasar a la antología del disparate" y anunció que su formación seguirá presionando para exigir responsabilidades políticas.

Mientras, el secretario general del PP balear, José Antonio Berastain declinó hacer una valoración respecto al resultado del informe redactadopor el equipo de Carlos Argos y se remitió a la reunión que celebrará mañana la Junta Regional del PP balear.

Por otro lado, Gabriel Cañellas declaró esta tarde a TVE que está dispuesto a dimitir de todos sus cargos si la dirección nacional del PP se lo pide.