El experto en desintoxicación dijo que no le impresionó ver al niño en el lamentable estado en el que se encontraba, "porque he visto muhos así". "Por desgracia hay muchos críos así, lo que pasa es que de vez en cuando salta a la opinión pública un caso como este. Este caso estamos viéndolo a diario".

De hecho, explicó que la asociación Engelmajer, a la que pertenece, tiene un centro especial de desintoxicación de menores drogadictos en Córdoba en el que hay cerca de 40 chavales de menos de 18 años, la mayoría con 13 y 14, en circunstancias similares al joven murciano su caso. Incluso llegaron a tener a un niño de 8 años adicto a las rogas.

Lujambio relató que el niño, José Luis, ingresó ayer en el centro en un estado muy débil, a causa de la drogadicción, pero también de la tuberculosis, neumonía y desnutrición que ha padecido. Indicó que está muy delgado y que debe pesar no más de 30 kilos.

El responsable recordó que el pequeño estaba en la calle medio tirado y que él mismo fue a pedir ayuda a unos policías, porque estaba fatal. El Instituto de Servicios Sociales de la Región de Murcia (ISSORM) se hizo cargo de él y se pusoen contacto con Engelmajer, con quien trabaja desde hace años, para que le acogieran en su centro de drogadictos.

Hoy mismo será trasladado al centro de la asociación en Córdoba, donde recibirá una atención especializada y podrá empezar a recibir las clases de un profesor que acude diariamente al centro para enseñar a los jóvenes.

Lujambio añadió que en el centro cordobés lo que se trata principalmente es que los jóvenes lleguen a madurar y se den cuenta del problema que tienen, porque "un crío aí está medio muerto". Como ejemplo de la actitud que suelen tener estos niños, relató que lo primero que ha pedido José Luis esta mañana es que le compraran una pistola de pistones.