Hermosín es uno de los diez imputados que comparten el banquillo de los acusados en el juicio contra Juan Guerra por un presunto delito de prevaricación.

En declaraciones a Srvimedia, las primeras que realiza dentro y fuera de la sala desde que se inició la vista la semana pasada, mostró su satisfacción al asegurar que las secuelas del "caso Guerra" no afectan a su electorado.

El alcalde de Alcalá de Guadaira reiteró que su ayuntamiento no está implicado en ninguna operación irregular. "Lo único que se hizo fue recibir a unos señores a través del arquitecto municipal, Ernesto Ollero, que deniega la petición de recalificación solicitada".

Hermosín insistió en que "aqu no hay absolutamente nada de que acusarme". En su opinión, la propia existencia del juicio no tiene justificación, porque "ya hay un juicio paralelo en la prensa con noticias interesadas y no tan interesadas".

"Como no hay acusación que se sostenga", añadió, "entrar en una dialéctica para hablar sería incluso perjudicial, porque no hay absolutamente nada", afirmó. Hermosín mostró su "gran confianza" en la sentencia exculpatoria de la Sala Tercera de Lo Penal de la Audiencia Provincial de Sevilla.

A su juicio, la repercusión social de la implicación de Alcalá de Guadaira en una trama del "caso Guerra" no ha repercutido negativamente en el electorado socialista de la localidad sevillana.

"El tema de Juan Guerra en Alcalá de Guadaira lleva ya varios años. El primer juicio que salió fue antes de las últimas elecciones municipales y volvimos a sacar mayoría absoluta. En estas elecciones generales hemos ganado incluso 4.000 votos y soy el alcalde más votado de España", agregó.