De ellas, el 70.5 por ciento (10.472 consultas) pertenecieron a Madrid capital, mientras que 1.961 (13,2 por ciento) a la zona sur de la comunidad. De la zona este fueron recibidas un total de 1.530 llamadas, que suponen el 10,3 por ciento, y el 6 por ciento restante, con 891 consultas, procedieron de la zona noroeste.

Según datos del Informe Sobre la actividad de la ODS en la Comunidad de Madrid, hecho público hoy, la causa que centró la mayoría de las consultas procedentes de Madrid captal fue la tramitación de exclusiones médicas por problemas físicos o psíquicos (19,7%), el mismo motivo que acaparó el primer puesto de las llamadas en las otras zonas de la comunidad.

Sin embargo, mientras que en Madrid la segunda causa fue la objeción de conciencia (13,3%), en las restantes zonas fueron los casos de indemnizaciones.

También varió el tercer motivo de las consultas entre la capital y el resto de la comunidad: en Madrid fueron los casos de accidentes con lesiones ocurridos durant el cumplimiento del servicio militar el tercer factor de las llamadas. Fuera de la capital los jóvenes se interesaron más por las tramitaciones de las prórrogas.

De las consultas procedentes de la capital, un total de 764, el 7,3 por ciento, se refieron a casos de abusos de autoridad, arbitrariedades y amenazas, mientras que las de malos tratos, tratamientos degradantes, humillaciones y vejaciones supusieron el 2,6 por ciento del total, con 272 consultas.

Este tipo de cuestiones no fueron plantedas por los jóvenes que llamaron de otros lugares de la comunidad madrileña, excepto por los de la zona este de la región, de donde un total de 118 consultas, el 7,7 por ciento, fueron relativas a malos tratos y vejaciones.

Según indicó el responsable del gabinete jurídico de la ODS, Ignacio Perelló, esto se debe a que en ese área está incluida la Brigada de Paracaidistas de Alcalá de Henares que es de donde procedieron la mayoría y más graves de las denuncias sobre vejaciones de toda España, convirtindo a ese acuartelamiento en "el punto negro caótico de los malos tratos en la Comunidad de Madrid".

Perelló también denunció la desidia y dejadez en la que, en su opinión, incurren tanto las autoridades madrileñas, que no facilitan información a los soldados sobre las cuestiones que les afectan, como el Ministerio de Defensa y la Justicia Militar, por no erradicar los casos de malos tratos del servicio militar "a pesar de que los conocen".