"Estoy inquieto como está inquieta una parte de la sociedad catalana, no tanto porque el acuerdo se haya producido, que esto era de manual, ya que era evidente que quien antes llegaría a un acuerdo con el Partido Socialista sería Convergencia i Unió, por motivos obvios", dijo Carod en la Ser.

"Lo que nos inquieta es ver la imprecisión que aún hoy, en algunos temas, está existiendo, porque básicamente hablaron de un par de temas, uno la definición nacional de Cataluña, que no nos satisface, y por otra parte todo lo relativo a la financiación, que es fundamental, porque sin recursos económicos no hay ninguna política posible, ni de derechas ni de izquierdas, ni progresista ni conservadora", agregó.

Respecto a la financiación, lamentó que no haya "una concreción escrita sobre el papel", por lo que consideró que "quizás ha sido un 'sí' precipitado", aunque "en todo caso es un 'sí' absolutamente legítimo que hay que respetar, pero que no es el nuestro".

Según Carod-Rovira, ERC va a seguir negociando, porque "Esquerra no tiene en estos momentos ni motivos suficientes para rechazar de lleno el texto del Estatut tal como está quedando, ni tampoco para apoyarlo con estusiasmo. Quedan aún importantes aspectos por determinar, por concretar".

El líder de ERC afirmó que quieren ver los textos escritos, "porque más allá de las palabras que se dicen en una reunión o en una conversación, cuando luego bajas al detalle es cuando puedes comprobar que el acuerdo es posible o bien es inviable".

Sí dejó claro que ERC no va a entrar "en la batalla de la prisa", porque "el Estatut ya está aprobado", es decir, cuenta ya con la mayoría suficiente para que sea aprobado en el Congreso de los Diputados.

Igualmente, comentó que el texto pactado "se aleja en aspectos muy fundamentales de lo que en su momento aprobó el Parlamento" de Cataluña.