Cáritas Níger destaca en una nota de prensa que esta fase de hambruna "se mantendrá en situación límite hasta que pueda comenzar a recogerse la próxima cosecha, a partir del próximo mes de octubre".

Además, esta ONG subraya que la hambruna "es más angustiante" en madres lactantes y niños desnutridos, por la escasez de alimentos básicos", lo que les convierte en la población "más vulnerable".

En este sentido, Cáritas Níger añade que está desbordada por la llegada a sus centros nutricionales de un número cada vez mayor de niños desnutridos.

Según los datos recientemente facilitados por el PNUD (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo), se calcula que en estos momentos existen en Níger 32.000 niños en estado de malnutrición severa, 160.000 en situación moderada y más de 260.000 mujeres encintas o lactantes afectadas de algún tipo de desnutrición.