CARDENAL. CASTELLANO CELEBRA EL CAMBIO DE CIU PORQUE "ARREPENTIDOS LOS QUIERE EL SEÑOR"

MADRID
SERVIMEDIA

El portavoz de Justicia del Grupo Parlamentario e IU, Pablo Castellano, celebró hoy con el irónico comentario "arrepentidos los quiere el Señor" la rectificación de CiU al exigir ahora al fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, y del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, condenen públicamente sin subterfugios las dictaduras de Chile y Argentina.

Castellano anunció el apoyo de su grupo a la proposición no de ley presentada por CiU porque IU, según dijo, "nunca se ha opuesto a la posibilidad de aclarar malentendidos".

A sujuicio, CiU está adoptando una actitud "muy buena y responsable", que consiste en "corregir todos los días" sus posiciones anteriores, ante lo cual "IU sólo puede manifestar un agradecimiento que, como no puede expresarse en lo material, ha de expresarse desde el punto de vista espiritual. La decisión de CiU nos conforta y satisface".

Para IU, lo sensato habría sido que tanto el fiscal general del Estado como el fiscal jefe de la Audiencia Nacional hubieran hecho ya las aclaraciones pertinentes sobre us afirmaciones justificatorias de las dictaduras chilena y argentina.

Sin embargo, "si desean hacerlo como consecuencia de una comparecencia pedida por la Cámara, porque está rodeado de mayor prosopopeya y liturgia, pues tampoco está mal. Al fin y al cabo, cuanto más ditirambo se produzca mayor solemnidad tendrá".

Pablo Castellano hizo también una valoración global de la situación del Ministerio Fiscal, en virtud de la cual acusó a "algunos fiscales" de estar llevando a "situaciones extremas su ilitancia política".

Se refería tanto a aquellos a los que se puede adscribir a las filas del PP a las del PSOE. "Creo", dijo, "que eso no es bueno, sería mejor que respetásemos todos el mandato constitucional que dice que mientras se está en la función judicial, o fiscal no se debe militar en los partido políticos".

A lU le preocupa especialmente el futuro del Ministerio Fiscal, por lo que propone "sentarnos todos en una mesa y configurar un nuevo modelo de fiscalía, que no fuera susceptible de er interpretado ni por el PSOE, ni por el PP, como un apéndice de los partidos".

"A lo mejor conseguimos encontrar ese modelo de fiscal constitucional y parlamentario que nos pone a todos a cubierto de estos espectáculos", concluyó Castellano.

(SERVIMEDIA)
27 Ene 1998
SGR