A pesar de que el consejero en funciones del Ejecutivo regional, Manuel Pérez, presentaba en la mañana de hoy las leyes de Presupuestos de Cantabria para los años 1994 y 199, éstas no podrán ser debatidas ni aprobadas hasta que se cierre la crisis política de la región, gobernada en funciones por Juan Hormaechea.

La Ley 9/93 de 28 de diciembre de 1993 obliga al Ejecutivo cántabro a tramitar a través del pleno de la Asamblea regional todos los créditos y pagos de la Diputación autónoma, así como la prórroga de los Presupuestos existentes en caso necesario.

La interinidad del Gabinete Hormaechea y la búsqueda de un sustituto para la Presidencia de Cantabria tienen en a actualidad paralizada toda la actividad del Parlamento cántabro.

Sólo en el caso de que la próxima semana, bien el martes 27 o el jueves 29, el regionalista Miguel Angel Revilla obtuviese el respaldo necesario para salir elegido presidente de la región, la Asamblea cántabra podría convocar un pleno extraordinario con el fin de aprobar una prórroga del Presupuesto en vigor, el ya prorrogado de 1993, a la espera de que el nuevo Ejecutivo remita una nueva ley económica.

La actual situación impide l Gobierno de Hormaechea acometer cualquier tipo de actuación económica, como la contratación de créditos o el pago de deudas, y únicamente los trabajadores públicos dependientes de la Diputación Regional podrán cobrar sus salarios a pesar del bloqueo existente.