Al respecto, una delegación de psicólogos militares mantiene desde hace un mes contactos con los portavoces políticos de la Comisión de Defensa a quienes han manifestado sus quejas porque no creen que las condiciones en las que están trabajando ean todo lo óptimas posibles.

El colectivo de profesionales piden, según las fuentes consultadas, un reconocimiento específico del cuerpo de psicólogos de las FAS como tienen otros cuerpos de carácter médico, lo que les daría una mayor capacidad de incidir en determinadas cuestiones.

Uno de los portavoces políticos consultados es el responsable de Defensa de CiU, Carles Campuzano, que confirmó los contactos y se manifestó favorable a "reformar en el seno de las Fuerzas Armadas el tratamiento que iene el cuerpo de psicólogos en el Ejército español".

Campuzano se refirió al homicidio ocurrido el sábado en el cuartel militar de Candanchú y dijo que "eso demuestra que seguramente en el marco de la reforma del Servicio Militar y del modelo de tropas profesionales toda la cuestión de la psicología militar la habremos de plantear".

"Un incidente de estas características", explicó, "es un ejemplo de que hay personas, como puede ocurrir en otras circunstancias y escenarios, que tienen responsabildad y que llevan armas de fuego reglamentarias y que seguramente no deberían llevarlas".