Los centros, que tendrán una capacidad de 40 plazas de internos y 30 de externos, estarán ubicados en los municipios de El Sauzal y Arucas, y comenzarán a funcionar a lo largo de 1999.

De Saja expicó que los centros estarán dotados con materiales de alta tecnología y su objetivo es mejorar la capacidades físicas y la formación, sobre todo en teletrabajo, de las personas con grandes discapacidades físicas.

El viceonsejero canario señaló que estos dos residencias serán las dos primeras de estas características en Canarias y se suman a las pocas que existen en el resto del Estado.

Finalmente, De Saja indicó que el objetivo de estos centros es dar continuidad, en su ámbito de centro de día, alas personas que que han sido atendidas en el Centro Nacional de Parapléjicos de Toledo.