El presupuesto del enlace, cuya longitud es de 2.684 metros, asciende a 413 millones de pesetas, según la Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid. El tráfico que canalizará será superior a los 40.000 vehículos diarios.

Dicho enlace resolverá la conexión de dos importantes ejes de penetración a Madrid, permitiendo todos los movimientos entre ambas carreteras mediante una estructura mixta de acero y hormigón sobre la autovía de Colmenar y otra de hormigón sobre la M-603 (antigua N-I).

Asimismo, han sido construidas tres estructuras más con el fin de salvar las principales arterias del Canal de Isabel II que abastecen de agua a la ciudad central (Canales Alto y del Atazar) y de completar el enlace con un paso inferior adicional.

Para aumentar las condiciones de seguridad vial se han separado los sentidos de circulación mediante una barrera rígida de hormigón y se ha dotado de alumbrado público al conjunto del enlace viario.

También ha sido cuidada la vegetación de los taludes rsultantes y los espacios libres que acompañan al enlace viario, para lo cual se han plantado bosquetes de coníferas frondosas y se han hidrosembrado los suelos libres.