Con esta decisión, la gasolina "súper" seguirá costando 94 pesetas porlitro desde las cero horas del martes, 90 pesetas la "normal" y 92 pesetas la "sin plomo". Tampoco los gasóleos de automoción (A y B) variarán su precio y seguirán costando 72 pesetas por litro.

Respecto a los gasóleos de calefacción, la bajada de 40 céntimos acordada por la compañía situará su precio en 41,9 pesetas por litro, si se trata de compras inferiores a 3.500 litros en estación de servicio, y en 39,1 pesetas en el caso de las compras a granel que superen esa cantidad.

Los precios de lasgasolinas y gasóleos de Campsa para la próxima quincena no se corresponde con la subida de entre 30 y 60 céntimos para los "máximos" de los combustibles autorizados la semana pasada por el Ministerio de Industria.

El Gobierno aprobó el pasado día 25 de febrero un aumento de 50 céntimos en el precio tope de la "súper" y la "sin plomo" y 60 céntimos en la "normal", situándolas en 95,8, 93,6 y 92,5 pesetas por litro, respectivamente.

Sin embargo, los gasóleos suben 40 céntimos frente a los 30 que auentaron los máximos de Industria, lo que deja una diferencia de 1,8 pesetas por litro en el caso de las modalidades A y B, y de 2,9 pesetas en el de los gasóleos C para calefacciones comprados a granel, que son la mayoría.

Los responsables de Campsa consultados por Servimedia justificaron el mantenimiento de los precios de gasolinas y gasóleos de automoción, en la política habitual de la compañía de no repercutir en los precios para el consumidor los cambios de céntimos que hace Industria.

Esta etrategia, añadieron, consiste en aplicar sobre los precios de venta al público sólo subidas de una peseta, por lo que no es descartable un aumento moderado en las próximas semanas, siempre que no reduzca sensiblemente el margen de diferencia con los topes del Ministerio de Industria.