Según contaron a Servimedia vecinos de El Campello, por los alrededores de los bancos e incluso enel interior de las oficinas, hombres con la característica común de ir impecablemente vestidos ofrecen el pago al contado de una cantidad superior al premio a los afortunados que acuden a las entidades bancarias para ingresar su correspondiente dinero.

Una de estas personas, premiada con 8 millones de pesetas, manifestó que "por todo el pueblo hay gente desconocida con maletines ofreciéndonos la compra de los décimos premiados; a mí me ofrecieron 9 millones por mis participaciones pero yo me negué porue sé que a la larga trae problemas".

El alcalde de El Campello, Javier Ruzafa, ha creado una Oficina de Información para Inversores con el fin de orientar a los premiados y evitar que sean objeto de fraudes y que malgasten ese dinero. Hasta hoy, más de un centenar de personas han acudido a la oficina para recibir este tipo de orientación.

Expertos en derecho financiero consultados por Servimedia alertan sobre las consecuencias de la venta de los décimos premiados, ya que Hacienda puede pedir expicaciones al contribuyente que haya declarado una cantidad importante de dinero sin información aparente de la procedencia, y puede ser objeto de responsabilidades y sanciones como encubridores de una operación de blanqueo de dinero negro.

Además, en el caso de que Hacienda no inspeccione, ese dinero no está exento de impuestos, y al declararlo hay que pagar tributos fiscales muy superiores.