La distribución de prensa diaria es respetada de frma generalizada por los piquetes de transportistas, aunque existen graves dificultades para el reparto en la zona norte del país, especialmente en el País Vasco, Galicia, Cantabria y la provincia de Burgos.

La repercusión de la huelga de camioneros incide también en el trabajo diario en la redacción de los periódicos, que en algunos casos se han visto forzados a adelantar el cierre de sus ediciones para iniciar con mayor margen de tiempo el reparto de los ejemplares.

Los problemas más importante se centran en la distribución de revistas, suplementos o cualquier otra publicación no considerada prensa diaria. "En algunos puntos se está recurriendo al transporte por avión para evitar los piquetes de camioneros", indicaron las fuentes consultadas.

"Muchas publicaciones, suplementos o revistas no podrán estar en los quioscos a tiempo, porque los piquetes consideran que estas revistas no son artículos de primera necesidad y paran a los camiones que las transportan. Por ello, muchos vendedores han ptado por tomar sus vehículos y acercarse a los puntos de distribución", señaló el portavoz de una importante empresa de distribución.

La radicalización de la huelga y su prolongación en el tiempo podrían provocar problemas de abastecimiento de papel y tinta a los periódicos, que por ahora tendrán que utilizar sus reservas para lanzar los ejemplares.