En un comuniado de prensa, las Cámaras indicaron que este cambio "supone adecuarse al gasto real y a los patrones cambiantes de consumo de la sociedad" y añadieron que "elimina los sesgos que se estaban produciendo anteriormente en el cálculo del IPC".

Además, señalaron que esta nueva metodología "podría elevar la medida de crecimiento de los precios respecto al modelo anterior, al dar má peso a la energía o a los servicios, productos que más se han encarecido en los últimos meses, en detrimento de los alimentosvestidos".

Por este motivo, las Camaras advirtieron de que las posible desviaciones al alza no deben ser trasladadas por los agentes económicos a sus expectativas de precios, puesto que "sería convertir una situación coyuntural, en términos de medicion del IPC, en una situación estructural en cuanto al comportamiento de los precios de nuestra economía".