Además, las autoridades regionales han iniciado el correspndiente expediente sancionador, tras la inspección que realizaron en la citada industria agentes ambientales.

Los funcionarios detectaron que la empresa quemaba de forma irregular en sus instalaciones los aceites usados generados como consecuencia de la actividad que realiza.

La gestión y control de los residuos tóxicos y peligrosos se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los responsables de las políticas medioambientales del Gobierno central y las comunidades autónomas.

Madrid es la cuarta comunidad autónoma que más residuos peligrosos genera, con 155.000 toneladas anuales, sólo por detrás de Cataluña (670.000 toneladas anuales), Andalucía (310.000) y el País Vasco (263.000).

Según revelan los datos oficiales, sólo un 12 por ciento de los residuos tóxicos y peligrosos generados en todo el Estado reciben algún tipo de tratamiento.