Calvo explicó a los medios de comunicación que se ha abierto un expediente informativo para dilucidar quién es el responsable de la grabación y para analizar el contenido de la misma, e indicó que "en unos meses" habrá una resolución, que será pública.

Según Calvo, el aspecto "más grave" de todo este asunto es el delictivo, "que se produzca una grabación en una reunión con carácter privado". A su juicio, "por muy grave que sea lo que se oye en la grabación, que además no me parece que sea tan grave, lo que sí es un delito es la grabación en sí misma", afirmó.

Reconoció que algunas afirmaciones de la grabación son "desafortunadas", pero restó trascendencia a las mismas. Explicó que cuando la Policía Municipal inspecciona locales para atender las quejas de los vecinos, es cierto que las actas se tramitan más rápido por determinadas infracciones.

Indicó que el objetivo de la policía en estos casos es que esos locales se cierren hasta que se adapten a la normativa vigente, y reconoció que eso se consigue más rápido por denuncias relativas al aforo, la no tenencia de licencias y el cumplimiento de la normativa sanitaria, que por otro tipo de vulneraciones de la normativa, "lo cual no quiere decir que no se persigan".

Para avalar esto último, indicó que el incremento de actas por consumo y tenencia de drogas en el distrito Centro por parte de la Policía Municipal "ha crecido de una manera espectacular este año con relación al anterior".