“Ha dejado claro que votar al PP es votar a Vox”, aseguró la número dos del Ejecutivo en declaraciones a Onda Cero, recogidas por Servimedia. “Hemos pasado de aceptar a gente que niega la importancia de la violencia de género a aceptar a gente que ha ejercido esa violencia y a hacerse fotos con personas que tienen por objetivo reducir los derechos de las mujeres y de las personas LGTBi”.

A juicio de la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, que el PP “haya tardado cero segundos en echarse en brazos de Vox nos dice claramente su programa de futuro”, y nos debe poner también en alerta sobre las consecuencias que podría tener la entrada de la extrema derecha en un Gobierno del PP, a la vista de lo que ha sucedido en países donde ha habido alianzas similares.

“Hungría no ha recibido ni un solo euro de fondos europeos, Polonia los tiene suspendidos y en Italia están parados”, avisó Calviño, que llegó a preguntarse si el hecho de que Feijóo lleve días “en silencio”, sin querer debatir ni avanzar los integrantes de su futuro equipo económico puede significar que “está reservando para alguien de Vox” la dirección de su política económica.

“Es algo inquietante”, insistió la vicepresidenta. “Con lo que estamos viendo con ese acuerdo de Valencia, todos tenemos que estar más activados que nunca”.

FONDOS EUROPEOS

Respecto al futuro de los fondos europeos que recibe España si el PP llega a La Moncloa y cambia reformas comprometidas con Bruselas como la de las pensiones o el nuevo marco laboral, afirmó que esas modificaciones de leyes importantes impulsadas por este Gobierno supondrían que habría que “renegociar con la Comisión Europea”, como está pasando en Italia tras la llegada al Gobierno de la extrema derecha.

Sobre el contenido económico del próximo programa electoral del PSOE, dijo que se está confeccionando estos días y declinó avanzar si incluirá o no una bajada de impuestos, en contraste con las promesas del PP, agregó Calviño, que “lo único que dice es que van a hacer una bajada masiva de impuestos, y eso collevará recortes de la política de bienestar, con una política que además se llevó por delante al Gobierno británico”.