Dicho plan, cuyo contenido expuso hoy Caldera ante la Comisión de Trabajo y Asuntos Sociales del Congreso, establece ayudas de 810 millones de euros para que este sector pueda afrontar sus problemas estructurales y la liberalización del mismo, y principalmente las exportaciones de China.

Caldera destacó que el sector del textil y la confección representa el 5% del PIB nacional, está conformado por unas 7.000 empresas, la mayoría pymes, y da empleo a unos 150.000 trabajadores, la mayoría mujeres.

De los 810 millones de euros que moviliza este plan, 220 millones corresponden a Industria para el fomento de la I+D+i, 140 millones a Trabajo para la inserción sociolaboral de los trabajadores y la mejora de su empleabilidad y 450 millones en una línea del Instituto de Crédito Oficial (ICO).

La concentración del sector textil en algunas comunidades autónomas, principalmente Cataluña, Comunidad Valenciana y algunas zonas de Castilla y León, hace "necesaria la implicación" de las regiones.

Las comunidades autónomas deben incorporar "medidas adicionales para completar y mejorar este plan", afirmó el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales.

Caldera indicó que los problemas estructurales y de la liberalización no afectan sólo al textil, tras lo que anunció que el calzado, el mueble y el juguete "en su momento" también contarán con medidas de apoyo.