Al ser preguntado en rueda de prensa, Caldera insistió en que no hubiera tenido ningún problema en pedir perdón y rectificar si realmente hubiera dicho, como se publicó, que los votos de CiU son "una puta mierda".

Se trata, reiteró, de un "incidente falso", por lo que lamentó que CiU haya dado "carta de naturaleza a algo que no tiene ningún sentido". Insinuó en este punto que la racción de esta formación "tiene que ver" con la relación que mantiene con el PP y que "intentan tapar" porque les perjudica ante las elecciones catalanas.

Caldera se mostró convencido de que PP y CiU pactaron todas sus propuestas de resolución en el Debate del Estado de la Nación, incluido el rechazo popular a todas las referidas al autogobierno, para aparentar un distanciamiento necesario ante esos comicios.

Por ese motivo, explicó, los socialistas votaron también en contra de todas esas propuesas de resolución, porque las creían pactadas "en el fondo" y porque su alternativa de autogobierno para Cataluña no es la de CiU, sino la que presente Pasqual Maragall.